Cirugía Malformaciones

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Labio y paladar hendidos
El labio leporino, nombre común por el que se conoce a un grupo de fisuras faciales, es una malformación congénita que puede afectar de múltiples maneras en forma y gravedad a varias estructuras faciales como labio, nariz, dientes, arcada maxilar y/o el paladar, tanto el duro (óseo) como el blando (el que tiene la musculatura). Puede afectar a un lado o a ambos.
Además de una deformidad estética, va provocar defectos en el crecimiento de la cara, en la oclusión dentaria entre maxilar y mandíbula, la deglución y si el paladar está afectado en la capacidad para la articulación del lenguaje.
A los 3-4 meses (pero dependiendo siempre del estado general del niño) ya puede operarse el labio y la nariz y a partir de los 12-16 meses puede cerrarse la fisura del paladar. El tratamiento integral durante el crecimiento del niño, comprende una estrategia de coordinación entre varios Especialistas como Ortodoncistas, Genetistas, Logopedas y Cirujano.

Existen otros tipos de fisuras más graves y deformantes que van a requerir tratamientos más complejos.